lunes, 13 de julio de 2015

Señora Escurridiza

Por fin frente a frente, Señora Escurridiza... Tu hermosa foto en la pantalla, y de este lado, yo.

De solo mirarte se me humedecen los ojos. No puedo dejar de hacerlo. No estás sola en la foto, estás con ella. Como debe ser, como será por siempre.

Te he soñado de manera incansable. Desde el primer día. Aunque el moquillo parecía haberle llevado todas las posibilidades de ser una perrita feliz, yo lo mismo soñaba con vos. No sabía que eras vos, porque eras una Señora Escurridiza.

Soñé con tu patio, con tu sillón con funda anti perros, con tu perrita Anastasia, con tus gatos. Soñé con tu esposo dándole de comer algo rico en la boca y sacándola a caminar. Soñé con vos. Una y otra vez, sin descanso, sin sentido común, como debe ser un sueño que se precie de tal.

Y cada vez que me sentaba donde estoy hoy, frente al monitor, mi sueño se convertía en diseños y colores. Fondo cruadrillé rosadito, puntillas alrededor de la foto, contraste e iluminación, efectos especiales de Photoshop, enfoques de frente y de perfil, sentada y caminando, medio cuerpo, primer plano, cuerpo completo, flores, corazones, hasta botones colorinches : "Esperanza en Adopción"

Y mientras diseñaba y publicaba...soñaba.

Una que yo sé también lo hacía. Pero ella tenia la ventaja de conocerte. Lo de ella era una ilusión más grande que una casa, lo mío era sueño puro y duro. Yo no sé, Señora Escurridiza, cómo no te ha golpeado nunca tanta energía acumulada que iba a parar derechito a tu casa, porque creéme que lo hemos deseado mucho.

Y ahora te me aparecés asi, de zopetón. Tan tranquila. Frente a mi pantalla. Sin previo aviso. Sonriendo suave mientras Esperanza mira inocentemente  con sus patitas semi tiesas sobre tu regazo.
Y comprendo que sabés. Comprendo que sabés lo fácil que es amarla y comprenderla. Vos sabés, por eso sonreís. Si, Señora Escurridiza, nosotras sabemos.

Si te digo que es fácil dejarla ir, te miento. Muchos pueden dar fe de lo que te digo. Si te digo que me hace feliz dejarla ir hacia vos, no te miento. Este es otro Efecto Esperanza no mencionado, esto es lo que esa hoja de ruta hacia la vida, ha dejado en mi. Abrazar a  las contradicciones.

El camino fue largo, pero sin alternativa. Tenía que serlo para que llegara a la puerta de tu casa acogedora y amorosa. Los sueños no se cumplen tan fácilmente, verdad?


Pero ahora te he atrapado, Señora Escurridiza. Tu imagen de mujer hermosa llena mi pantalla. 

Y esta vez es tu energía la que llega a mi. 

Sos la madre de mi hija.

Voy a extrañar soñarte.


No hay comentarios:

Publicar un comentario