jueves, 31 de julio de 2014

Buena Vida Besuquera...

Te preparás el mate, te sentás frente a la PC, y entrás a Facebook. Empieza una rutina tranquila en una tarde casi cálida y apacible. Una enana perdida para publicar, pedidos de tránsito para compartir y ayudar a difundir, mensajes de amigos por responder.

Me prendo un pucho. Y empiezo a leer.

 "ADOPTADAS. Mejora la noticia el hecho de que ambas fueran adoptadas siendo ADULTAS, porque un perro que recibe amor se adapta muy rápido. "  Asi arranca el post de Voluntad de Perros. Ni miro la foto, simplemente continúo leyendo y llego a: "Con inmensa alegría puedo decir que Tai Pei adoptó a una familia". Entonces el pucho se queda en el cenicero, el mate se empieza a enfriar, yo solo quiero volver a leer eso: 

"Con inmensa alegría puedo decir que Tai Pei adoptó a una familia"
"Con inmensa alegría puedo decir que Tai Pei adoptó a una familia"
"Con inmensa alegría puedo decir que Tai Pei adoptó a una familia"

Y entonces me pongo a llorar.

Tai Pei era mi tema pendiente. Llegó a casa en diciembre del 2012. Pasó con nosotros esas Fiestas. Después de dos meses no la pude seguir teniendo en tránsito. Y tuvo que dejar la casa sin haber sido adoptada. Y de mi hogar se fueron los besos, asi se simple, se fueron los besos. Y pasaron los meses mientras Tai Pei esperaba infructuosamente una adopción . Cada tanto, una nueva publicación, nadie parecía verla.

Una marca pichicho al cien por ciento. Como tantas otras...pero con una cualidad única, la mayor besuquera que tuve en mi vida, con todos los récords de besos en los momentos y lugares más inusuales. Era un amor que llevaba dentro esa perrita que no podías evitar conmoverte.

Y como pasa especialmente cuando empezás a dar tránsitos y tenés poca experiencia, desarrollás un sentido de propiedad que nadie puede borrar de tu mente y de tu corazón. Y más aún cuando se trata de ser besada todo el tiempo desde que te levantás hasta que te vas a dormir. Ahora sé que ese sentido de propiedad se va solamente cuando el perrito que estás amparando se instala con su familia para siempre. Por ese motivo es que hasta precisamente hoy, nunca dejé de sentir el desgarro de aquella despedida.

Mi Tai Pei
Y ahí está la loca, posando en esa foto junto a la de otra perrita que también fue adoptada. Y la publicación me cuenta que fue ella la que  eligió a sus adoptantes, conquistando al dueño de casa mientras lo acompañaba día a día en sus recorridos por la finca. Qué se habrán comunicado esos dos en esos recorridos, qué cosas habrán empezado a sentir uno por el otro, ella lo habrá besado mucho?...

Mi Tai Pei, la Tai Pei de Mariana...ya no es nuestra. Ella tenía un destino de amor y corrió de una vez por todas a cumplirlo. Le llevó su tiempo pero lo logró.  Tai Pei bella. Señorita, educada, suave, buena...

Hay ahora una familia que tiene un tesoro en su casa.
Y yo por fin puedo sentir...que no la abandoné.

Te amo y siempre te amaré, señorita Tai Pei.
¡Buena Vida Besuquera!


Nota: Asi era mi vida con Tai Pei en ella:
http://hogardetransitoperritos.blogspot.com.ar/search/label/Besuquera




Apoyá nuestra página en Facebook. La difusión encuentra las ayudas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario